Una sencilla, pero rica y sobretodo saludable receta para prepararte un desayuno en menos de 5 minutos: Yogur con frutos del bosque y plátano. ¡Vamos a prepararla!
Muchos de vosotros me preguntáis muchas veces que podéis desayunar, pues bien, para una de mis primeras recetas en la web os traigo uno de mis desayunos favoritos: yogur natural con frutos del bosque, plátano y avellanas. Aunque mirándolo bien, podríamos usarlo como merienda, o incluso como postre.
Sin embargo, me gustaría señalar que desayunar no es absolutamente imprescindible; si cuando te levantas no tienes nada de hambre y solo te entra un café con leche con galletas, mejor no desayunes.
Las galletas, por mucho que nos hayan hecho, no son para nada saludables. Eso sí, si no desayunas, tu siguiente comida debe estar basada en comida real, debe ser una comida saludable. Da igual la hora, lo importante es elegir bien los alimentos.
Y después de esta larga introducción, vamos de lleno con la receta.

Yogur con frutos del bosque, plátano y avellanas
Ingredientes
- 1 Yogur natural sin azúcar añadido
- 1 plátano
- 50 g. Frambuesas
- 50 g. Arándanos
- 25 g. Avellanas
Elaboración paso a paso
- Ponemos el yogur natural en un bol, añadimos el plátano cortado en rodajas, las frambuesas y arándanos, colocamos las avellanas por encima.Y, ¡a disfrutar!
Notas
Como habéis visto, es una receta la mar de sencilla, pero que nos va aportar una buena cantidad de vitaminas y minerales. Las frambuesas son ricas en vitamina C y antioxidantes, como flavonoides y ácido elágico. Además, nos aportarán una interesante cantidad de fibra.
El plátano es bien conocido por ser fuente de magnesio (alrededor de 27 mg. en 100 g.), pero también es una buena fuente de vitamina B6, aportándonos aproximadamente 0,367 mg., lo que equivaldría al 28% de las cantidades diarias recomendadas.
Los arándanos son otra buena fuente de vitamina C, pero también de vitamina K (19,3 µg en 100 g., alrededor del 18% de las CDR).
Para terminar, un puñado de avellanas (unos 30 g.) nos aportará casi el 50% de las cantidades diarias recomendadas de vitamina E, unos 7,5 mg. Además, es una buena fuente de calcio y alta en proteínas y ácidos grasos monoinsaturados.
Y por último, quería dejar para el final al yogur natural. Es importante señalar que el yogur debe ser natural y sin azúcar añadido. Un yogur natural tiene básicamente 2 ingredientes: leche entera y fermentos lácticos.
Si un yogur tiene más de 3 ingredientes, ya no es un yogur, es un producto lácteo. Otro de los mitos arraigados en nutrición es la necesidad de tomar lácteos diariamente, sin embargo, al igual que el desayuno, no son imprescindibles. Si te gustan y te sientan bien, cómelos, intentando elegir lácteos de calidad y fermentados como yogur, queso o kéfir.
Un plus añadido si proceden de vacas que pastan pasto, tu salud y el medio ambiente te lo agradecerán. Carlos Martín, miembro de Dietética sin patrocinadores lo explica muy bien en el blog de Fitness Revolucionario. Si te sientan mal o no te gustan, hay otras opciones igual de saludables.
Espero que os haya gustado esta receta y sigáis disfrutando de la comida saludable.
¡Qué aproveche!